El 31 de Julio de 2019, el gobierno de Estados Unidos a través de el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (IC) anuncia la búsqueda de Samark José López Bello, presunto testaferro del ministro de Industrias y Producción Nacional del régimen de Nicolás Maduro, Tareck el Aissami, por narcotráfico y fraude.
En ese entonces, el organismo recordó que López Bello fue sujeto de una persecución que comenzó en meses pasados, luego de la desarticulación de una compleja operación internacional de evasión de sanciones y lavado de activos.
En febrero de 2017, la Oficina de Control de Activos de Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos calificó a López y a El Aissami como narcotraficantes, por jugar un papel significativo en el narcotráfico internacional.
La oficina de inmigración refiere que el empresario venezolano, de 45 años de edad, financió y proporcionó asistencia material para actividades ilícitas, actuando bajo el nombre de El Aissami. “Por más de dos años, López y otros defraudaron al gobierno de Estados Unidos al participar en transacciones prohibidas por la ley, además de evadir sanciones impuestas por la OFAC” destaca el sitio web del ICE.
En agosto de ese año, la defensa llevó adelante el reclamo por la exposición de la figura de Samark López y lograron el cambio de acusación ya que el empresario no tiene cargo por narcotrafico sino de violación de sanciones.